La polémica actriz Lindsay Lohan ha regresado a las pantallas de televisión para someterse a la entrevista en el programa de David Letterman en la que ha declarado que es “una bendición” poder someterse a terapia de rehabilitación de sus múltiples adicciones porque supone una “oportunidad” para centrarse en su trabajo.
La actriz volverá a un centro de rehabilitación el próximo 2 de mayo. Sin embargo, Lohan se mostró incómoda y sorprendida ante las preguntas de Letterman. “¿Tienes problemas de adicción? ¿Bebes demasiado? ¿De qué te van a tratar cuando entres por la puerta?”, le interrogó Letterman.
“No hemos hablado sobre esto en la preparación de esta entrevista“, respondió bastante enojada antes de seguir respondiendo. “Para ser honesta, soy la más feliz cuando estoy trabajando, y soy la más sana, y pienso que esto es una oportunidad para mí para centrarme en lo que me gusta en la vida. No creo que sea algo malo, creo que es una bendición”, añadió Lohan.
Lindsay Lohan ya evitó ir a la cárcel el pasado mes de marzo tras acordar con las autoridades ingresar en un centro de rehabilitación durante tres meses. Pero el alcohol, las drogas y sus problemas de conducción la han acompañado desde 2005, cuando ya admitió siendo menor de edad que acudía a reuniones de alcohólicos anónimos, era bulímica y consumía drogas.