Foto del 12 de marzo del 2013 del senador republicano Marco Rubio en el Capitolio de Washington. Rubio dijo el domingo, 14 de abril del 2013 que la reforma de la ley de inmigración “no es una amnistía”. (Foto AP/Susan Walsh)
WASHINGTON (AP) — Un acuerdo bipartidista para lograr una reforma migratoria necesitará un riguroso cumplimiento de la ley que incluya sanciones más severas para quienes hayan ingresado sin permiso en Estados Unidos, afirmó el domingo un prominente senador republicano que ha sido pieza central en las negociaciones.
El cubano-estadounidense Marco Rubio, uno de los ocho senadores que elaboran la iniciativa -la cual podría estar lista para el martes- perfiló su postura para el marco básico de la propuesta, que podría contener la opción de la ciudadanía para aquellos que llegaron sin autorización legal o que excedieron su permanencia como visitantes en el país.
Aunque el acuerdo bipartidista contempla un proceso largo y difícil para los 11 millones de individuos en cuestión tramiten su naturalización, Rubio insistió en que la propuesta no incluye una “amnistía”, tal como sostienen colegas conservadores de Rubio que consideran ese punto un obstáculo insalvable.
“No hemos concedido nada a nadie. Lo único que estamos haciendo es dar a las personas la oportunidad de que con el tiempo puedan acceder a nuestro nuevo sistema legal de inmigración, mejorado y modernizado”, dijo el senador Rubio, de Florida.
Sin embargo, persisten las dudas incluso entre los copartidarios de Rubio.
“No estoy convencido”, dijo el senador republicano Jeff Sessions. “Sé que Rubio está de corazón en lo correcto. En verdad respeto el trabajo realizado por el grupo de ocho senadores. Pero han elaborado una propuesta… que concederá una amnistía ahora, que en la práctica legaliza a todos los que están aquí hoy y después contiene el compromiso de que se hará cumplir la ley en el futuro”, apuntó.
El senador republicano Mike Lee dijo que “el camino a la ciudadanía, justo ahora, antes de que todos esos elementos se pongan en marcha, para mí impide forjar un acuerdo”
El legislador dijo que consideraría apoyar las propuestas sólo si la principal prioridad fuera la seguridad fronteriza.
Rubio dijo que podría retirarse de los esfuerzos para concretar la reforma migratoria de llegar a suavizarse el cumplimiento de la ley, la seguridad fronteriza y otros elementos que se han planteado.
Con la mira puesta en una posible postulación para la Casa Blanca en 2016, Rubio ha sido muy cuidadoso de no parecer débil en cuanto a la seguridad fronteriza y evitarse complicaciones políticas entre los conservadores que tienen gran influencia en la elección del candidato presidencial del Partido Republicano.
Rubio también aseguró a los inmigrantes que quizá les sea más fácil regresar a sus países de origen y comenzar desde cero el proceso que aprovechar el trámite que él propone.
“Así las cosas, yo diría que la ley existente es de hecho más indulgente; regresar y esperar 10 años será más barato y más rápido que pasar por todo el proceso que estamos planteando”, aseveró.
Otros legisladores que participan en la elaboración de la iniciativa reconocieron los desafíos políticos que rodean a la reforma migratoria.
“Muchos de mis colegas conservadores tienen importantes dudas y son legítimas”, manifestó el senador republicano John McCain. “Este es el comienzo de un proceso, este es un instrumento que necesita audiencias, alimentación y todos damos la bienvenida a todo eso. Estoy cautelosamente optimista de que finalmente veremos un final para este largo, largo trayecto en el que muchos hemos estado por muchos años”.
La medida ofrecería a millones de personas que no cuentan con documentos migratorios un mecanismo para tramitar en 13 años su naturalización, mientras se endurecen las medidas de seguridad en la frontera, se obliga a todos los patrones a verificar el estatus migratorio de sus trabajadores y permitiría que decenas de miles de trabajadores calificados lleguen al país con nuevos programas de visas.
Se espera que el proyecto incluya un nuevo énfasis en una inmigración basada en los lazos familiares.
“Este es un proyecto bien balanceado. Los estadounidenses nos han pedido dos cosas: una: evitar futuros flujos de inmigración no autorizada; y dos: obtener una solución con sentido común para la inmigración ilegal. Y eso es lo que nuestro proyecto hace”, dijo el senador Chuck Schumer.
Sin embargo todo esto está supeditado a la seguridad fronteriza y aplicación de la ley, dijo Rubio.
“Si ahora no tienes documentos migratorios, si estás sin permiso en Estados Unidos, entonces ni siquiera puedes hacer la solicitud hasta que este plan exista y comience a implementarse”, agregó el legislador de origen cubano. “Y entonces tendrán que pagar una multa, una cuota para hacer la solicitud y aprobar una revisión de antecedentes”.
Sin esas piezas, el camino a la ciudadanía no está disponible y la propuesta sólo será viable para aquellos que llegaron a Estados Unidos antes del 31 de diciembre de 2011. Cualquiera que llegó después de esa fecha estará sujeto a deportación.
Rubio presentó sus argumentos en entrevistas con “This Week” de la cadena ABC; “Face the Nation de CBS; “State of the Union” de CNN; “Fox News Sunday” y “Meet the Press” de NBC. También estuvo en las cadenas de habla hispana Telemundo y Univision. Sessions y Schumer estuvieron en ABC y McCain en CNN.
Por su parte, la ex gobernadora de Alaska Sarah Palin dijo que los estadounidenses estarán abiertos a reformar las leyes migratorias del país, pero que el gobierno federal deberá asegurar primero las fronteras. La republicana hizo las declaraciones durante una visita al estado fronterizo de Arizona.